Mientras bajaba de la movilidad en aquella parada yuxtapuesta a la plaza San Francisco mi curiosidad pudo más que mi agenda. El informativo de algún programa radial cuando estaba dentro del coche me dio por enterado: "La pasarela de la Pérez ya ha sido inaugurada". Un día antes, el domingo 11 de noviembre de 2007 había terminado la espera tan ansiada (casi desesperada) por aquella pasarela. De seguro el alcalde rompió una botella de champaña o cerveza para acallar la sed de la Pacahamama, eso después de haber regado de flores el espacio, y haber cortado la cinta que restringía el ingreso a la obra.

Nace en mi la duda, si anteriormente, antes del acto de inauguración no fue estrenada ya la pasarela, esto, porque no falto la noche o madrugada en la que mientras recogía mi cuerpo, involuntariamente, yo veía como cruzaba por sus cimientos la población (tal vez por seguridad, tal vez por un sentimiento intrépido, tal vez por el cansancio de esperar tanto tiempo por una pasarela). Existen atrevidos relatos de algunos amigos quienes me contaron cuan alucinante era el compartir responsablemente unas cuantas copas de licor (yo diría vasos de plástico rellenos de la mezcla etílica de seis combos de doce bolivianos). Me relataron una vivencia de la que más o menos recuerdo lo siguiente: "Se veían las cosas desde otra perspectiva, escuchar a los ayudantes de los chóferes anunciar diferentes destinos, mirar como la gente cruzaba de manera presurosa las calles mientras dormían las cebras, oler la oferta de diferentes productos, ver desaparecer el día para sentir el abrazo de la noche, escuchar discutir a algunas vendedoras ambulantes, sentir como correlativamente se encendían las luces de algunas tarimas; escapar de la guardia municipal y sus toletes amenazadores que luchaban por hacer cumplir las ordenanzas municipales".

El relato anterior hizo despertar en mí la inquietud de ver lo que pasaba con la pasarela. Así, pues como de San Francisco a la Pérez no hay mucha distancia emprendí mi aventura entre lustrabotas, vendedoras ambulantes, cebras, policías, guardias municipales, oficinistas y demás personajes paceños. Una vez llegué a la que anteriormente fue la plazuela Pérez Velasco, ahora final Evarsito Valle, vi como algunos Auqui Auqui, acompañados por melodías autóctonas, bailaban al pie de la pasarela, algo me decía que se habían atrasado a la inauguración. Mientras ascendía por ella sentí algo diferente, pues mis pies no necesitaron subir por incontables gradas, sentía cierto confort, mientras, escuchaba como dos comerciantes, marido y mujer, ofrecían bolígrafos, dándole un uso alternativo a la pasarela. Era un poco difícil el recorrer la pasarela, tuve que evadir algunos cuerpos obesos, delgados, y hasta esculturales, pues no existen carriles para llegar a de la Evaristo Valle a la Comercio o viceversa. Los edificios se veían algo diferentes, algo había sucedido con ellos, "!Ah!" exclame dentro mío "los han pintado a algunos". Paralelamente, de yapa o regalo venían descendiendo por la avenida Montes una gran cantidad de marchistas, quienes al parecer no querían cruzar por la pasarela, no se detenían, pues "En la Pérez no se sube ni se baja"; el estribillo de la manifestación hacía vivas por los Comerciantes Minoristas y Gremiales, mientras solicitaban la muerte del Alcalde y sus funcionarios; nuevamente, de seguro algo estaba pasando con la negociación emprendida entre los Comerciantes y el Plan de Ordenamiento Territorial de la ciudad. Una vez llegando al otro extremo de la pasarela y al arribar la calle Comercio pareció terminar mi aventura en la pasarela, pero no fue así. Vi a unos jóvenes vestidos con una polera amarilla con un estampadao, el cual solicitaba explícitamente se use la pasarela, los jóvenes trabajaban, probablemente se organizaban, mientras reían y tomaban unos helados. Terminó el recorrido de una pasarela moderna, con bastantes luminarias y espacio, pensé: "bonita está la pasarela, espero reciba buen uso"; mientras a mi lado un dúo de amigos ya entrados en edad conversaba, uno de ellos precisamente se refería a la pasarela "medio millón de dolares y tanto tiempo para esta huevada".

NOTAS:



  • La pasarela de la Pérez Velasco, no se llama así, se llama pasarela "Comercio-Evaristo Valle" y si su nombre original no es usado, será una vez más que pudo nuestra costumbre contra las modificaciones.


  • Costó 588.494 dólares (4.734.938 bolivianos) gracias a un crédito del Banco Interamericano de Desarrollo (BID). El diseño pertenece al el arquitecto José Márquez y une la plaza fundacional de La Paz (Alonso de Mendoza) con el centro político del país (plaza Murillo). Contempla aspectos urbanísticos, facilidad de los accesos, iluminación y visibilidad que brinda seguridad ciudadana.


  • La Pasarela Comercio – Evaristo Valle tiene una longitud de 63 metros lineales. Cuenta con cuatro rampas de acceso y una próxima que conectará con el mercado Lanza. La altura máxima es de 6,5 metros y la mínima de 5,5 metros. El ancho de la rampa es de 4,20 metros. El tipo de estructura es postensado con cimentación de pilotes.


  • La construcción de la Pasarela permitió la habilitación de dos espacios: la plazoleta elevada Pichincha con un área de 3.230 metros cuadrados y la plazoleta Evaristo Valle con un área de 3.230 metros cuadrados.


  • Otro elemento importante es la Galería Comercial que está ubicada debajo de la plazoleta Pichincha. En este espacio se ubicaron 48 anaqueles en una superficie de 544 metros cuadrados.


  • Se habilitó una jardinera central que tiene 1.100 metros cuadrados de áreas verdes y una altura de dos metros. 26 mil plantines dan vida a este sector, además de 530 metros lineales de rejillas.


  • Entre otras obras tenemos el revestimiento de pisos y el mobiliario urbano (cuatro banquetas, 20 papeleros y dos totems luminosos de información).


  • Las barandas de la Pasarela forman con sus colores un tejido andino que representa la unión de dos partes de la ciudad, que antiguamente eran la ciudad de los españoles y la ciudad de los originarios, separadas por el río Choqueyapu.


  • 169 puntos de luz iluminan la pasarela: 42 luminarias instaladas en postes y 127 en puntos inferiores, unos en las estructuras de hormigón armado y otros en la jardinera central.

Fotografía: Página web de la HAMLP www.lapaz.bo, en la subdirección http://www.lapaz.bo/home/data/portada2/11_PASARELA1.jpg

6 comentarios:

  1. Alexis:
    tu como yo vamos a la ciudad desde El Alto,no crees que esta pasarela rompe la estetica de las construcciones de tipo colonial del casco viejo, un diseño moderno que cruza la antiguedad?
    compara con la av. Camacho te imaginas en medio una pasarela de madera, tu que opinas...

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  2. Me pregunto que pasará con las entradas folklóricas.

    Será que las harán cambiar de ruta para que no dañen la jardinera central debajo de la pasarela?

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  3. Mario: La pasarela de la Pérez puede romper con la armonía, pero la verdad es que hay mucho de razón en una opinión que escuche en una de lass entrevistas de CIUDAD CUETILLO. "La lucha continúa entre lo tradicional y lo modernista en La Paz". Buena o mala es nuestra pasarela, si bien ella puede romper el contraste hay algunos edificios que buscan armonizar el estilo arquitectónico colonial y urbanístico en la misma Pérez. En el caso de la Camacho lo gracioso es la inserción de la cruz andina en las aceras y las bancas de madera cubiertas con un techo a dos aguas ornamentado por tejas. Es triste, pero hasta hoy ni el municipio ni los arquitectos definen el estilo arquitectónico que mejor podría acomodarse a nuestra ínclita ciudad. Solo espero que tal observación no haga que el Colegio de Arquitectos no quiera derruir tal monumento, o peor aún que este espacio sea utilizado para hacer manifestaciones y marchas más seguras, jajajaja.

    Cristina: Lo más seguro es que tenga que cambiar la ruta, pero ten por seguro que la picardía urbandina podrá más para que todas las fastuosas entradas cruzen la Pérez Velasco. Aunque tal vez ahora las entradas comiencen en los pies de la pasarela en la Av. Comercio, luego crucen la Pasarela, continuando el baile por la final Evaristo Valle, para continuar su recorrido por la Mariscal Santa Cruz, jajaja.

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  4. Todo un adefesio
    todisimo un adefesio querido amigo, y tan caro además.

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  5. ...hola??...
    a ver.. primero... bien tu blog che!... recien q paso por aca.. y creo q ahora lo hare mas seguido..
    2do...no puedo opinar acerca de su nueva pasarela, ya q no la conozco!!(otro motivo más pa' ir a La Paz)..

    hasta la proxima..

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  6. Perro: Como todo, este nuevo monumento tiene simpatizantes y detractores, al parecr tiene más destractores jajaja. Eso si, será un adefecio, un adefecio util pero. ¿Cuándo nos definiremos no?, ¿Modernos o coloniales?, ¿Conservadores o yevolushionarios? ¿Cholos o jailones?

    flaka: Primero: Todo un placer el recibirte siempre en este espacio. Gracias por las flores y el tiempo de lectura allá en la distancia. Segundo: Perdé todo cuidado, opinas cuando te dés una vueltita por la ciudad de La Paz. Por cierto, si quieres tener otros motivos para conocer Bolivia, La Paz y otros departamentos de nuestro bello, pero conflictivo país, te invito a pasar por otro blog mio CONOCER BOLIVIA VIAJANDO http://guiadeturismobolivia.com

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