Doce meses después, trece libros se han ganado un espacio en mi biblioteca personal; rincón hacinado que cada año se hace menor. Libros que han hecho algo más que ganar polvo, que se han llenado de post-its, que espero releer, porque desesperan, porque esperan pacientes, porque recibieron atención y todavía piden más.
Hay
otros que no quiero olvidar, no todavía, pero tarde o temprano lo haré, voy a
hacerlo; lástima pero debo ser selectivo. Esos a los que agradezco haber pasado
por mis manos, por mi vida, pero voy a dejarlos ir; y no porque sean malos,
sino porque no soy su público, porque todavía no lo soy y no sé si vaya a serlo.
Libros
que han valido para mí, si no por su integridad, por fragmentos que me han
valido a manera de grandes aforismos, a manera de escuela para seguir
aprendiendo a narrar. El 2012 fue un año de muchas lecturas.
Los
trece libros que, también sugiero pero que, no ingresaron en la lista de “los
otros trece”, son los siguientes: Bouvard y Pécuchet de Gustave Flaubert, Crónicas de asfalto de Samuel Benchetrit, Tres rosas amarillas de Raymond
Carver, En la senda del perdedor de Charles Bukowski, Amor se escribe sin
hache de Enrique Jardiel Poncela, Desde el jardín de Jerzy Kosinski, El
farmer de Andrés Rivera, Cuentos fantásticos hispanoamericanos Antología de
Mignon Domínguez, Rodolfo el descreído de David S. Villazón, La tumba
infecunda de René Bascopé, Conductores y seductores de Leonard Reinisch, y
Dr. Kurt Hoffman, Borges oral de Jorge Luis Borges y Pensamientos de
Pascal.
¿Y
qué de “los otros trece”? Los trece libros que me marcaron el 2012 son los
siguientes:
13. Carmen
Prosper
Mérimée
Biblioteca
de EL SOL
Traducción
de Luis López Jiménez y Luis-Eduardo López Esteve
12. Ibis
J.
M. Vargas Vila
Ramón
Sopena
11. Cuentos reunidos
Felisberto
Hernández
ETERNA
CADENCIA editora
10. Chincanqui. Kallawaya y agitador
Toqo
Zuleta
I.C.I
Instituto de Cultura Indígena, Humauaca
09. Querido Miguel
Natalia
Ginzburg
Ediciones
Librerías Fausto
Traducción
de Marcela Milano
08. Autobiografía de Alice B. Toklas
Gertrude
Stein
BRUGUERA.
LIBRO AMIGO
Traducción
de Carlos Ribalta
07. Op Oloop
Juan
Filloy
Paidós
06. Chaco”
Luis
Toro Ramallo
Nascimento
05. La revolución es un sueño eterno
Andrés
Rivera
Alfaguara
04. La dama del perrito
Anton
Chéjov
Biblioteca
Contemporánea
Traducción
de E. Podgursky y A. Aguilar
03. País de las sombras largas
Hans
Ruesch
Ediciones
LA ISLA
Traducción
de Alberto Luis Bixio
02. La palabra del mudo
Julio
Ramón Ribeyro
Seix
Barral
01. El Gatopardo
Giuseppe Tomasi de Lampedusa
Ediciones Orbis
Traducción
de Fernando Gutiérrez
¿Por qué “El Gatopardo” encabeza esta lista?
En el techo los
dioses, reclinados sobre dorados escaños, miraban hacia abajo sonrientes e
inexorables como el cielo de verano. Creíanse eternos: una bomba fabricada en
Pittsbourgh Penn, demostraría en 1943 lo contrario.
Uno de los temas más universales del ser humano es El Olvido. Ya nadie recuerda
nada, la tradición generacional se ha quedado en manos de generaciones
anteriores. Entonces caemos en falsos debates, en argumentos que son más bien
emocionales, que son condicionantes al hecho de la simpatía temporal o del
hecho interpretable.
Los
guardianes del conocimiento son cada vez menos, los árboles genealógicos ya no
tienen raíces o las han olvidado. Entonces hay un candado tras otro; el acto
retórico que no esconde más que enunciados. El master dixit, lo cual, si bien ha
permitido que la discriminación se reduzca, también ha sepultado entre el polvo lo
todo anterior sufrido entre discriminados y discriminantes. Entonces se vive
más de lo que se piensa.
Son bastantes los enfoques con los que se puede hacer
lectura de un libro tan melancólico como este, “la melancolía de lo ajeno”, de
aquello que nos sucede y nos ha de suceder. Un libro tan bien escrito y que se irá con cada lectura, la lectura de los hechos… la siempre
incompleta y mal hecha.
Fabrizio y Tancredi se van; así como la historia familiar
de Giuseppe Tomasi de Lampeduza. El Gatopardo, finalmente, no es más que el
emblema heráldico de una familia monárquica que se ha ido, como poco a poco se
nos van de las manos los límites de todo lo habido y por haber.
Somos, lo que Bendicò, para la familia de El Gatopardo. Somos
los perros que han pasado por la historia familiar, los que se han ido y han
sido disecados... “inmortalizados en la memoria”, para luego ser tirados a la
basura.
La
muerte implica reciclado; un reciclado al que, erróneamente, llamamos:
Nacimiento
Hay
que leer a este clásico Italiano. Hay que releerlo.
Hace unos días encontré Conductores y Seductores, así llegué a esta lista.
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